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Jessmy manejaba del trabajo hacia su casa como cualquier día normal. Una conductora dio vuelta a la izquierda en sentido opuesto, aunque Jessmy tenía el derecho de continuar. Al no poder parar a tiempo, Jessmy choco con la conductora que se le atravesó ilegalmente. En el momento, Jessmy no sabía que hacer y se quedó en su coche en shock. Afortunadamente, un policía estaba cerca y ayudo a Jessmy a salir de su coche.

Después del accidente, Jessmy hablo a su compañía de seguro, pero no la ayudaron a recibir la ayuda que necesitaba para ir al doctor. Para protegerse, decidió hablar a Los Defensores.

Cuando hablo a Los Defensores, todo se volvió más fácil. El abogado tomo todas las llamadas de la otra compañía de seguro. El abogado la mando a terapias físicas y le aseguro que no iba a pagar nada de su bolsillo. Después de algunos meses, el caso se resolvió y todos los gastos del accidente se pagaron. Jessmy pudo comprar un carro nuevo y continuar su vida normalmente.

Jessmy
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Abel iba manejando hacia el centro de Los Angeles para comprar ropa y juguetes para su familia y mandarla a México. Al frenar en una luz roja, el carro que iba detrás no alcanzo a frenar o a disminuir la velocidad a tiempo por venir testeando mientras manejaba. El golpe fue muy fuerte.

Después del accidente, lo primero que pensó Abel fue “Desconozco las leyes de aquí” y para no correr riesgos, decidió hablar a Los Defensores.

Cuando hablo a Los Defensores, le dio confianza. Los abogados lo visitaron al siguiente día y lo mandaron a terapias y le explicaron a detalle sobre sus terapias. Siempre lo mantuvieron informado sobre su caso. Su caso se resolvió y todos los gastos del accidente se pagaron.

Ahora Abel dice “Siempre cargo el número de Los Defensores por si pasa algo.”

Abel
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Cristina trabajaba en una tienda de farmacia popular. Ella se dedicaba a varias cosas, incluyendo a abastecer mercancía. Un día, ella se subió a una escalera para abastecer la mercancía en la parte alta de la repisa. La escalera se abrió y Cristina cayó al piso con todo y repisa. Su supervisora la tuvo que llevar al doctor debido a que no podía caminar bien y tenía dolor intenso en su mano izquierda.
Después de su caída, la farmacia la mando a un doctor, pero con el tiempo le estaban bajando sus horas de trabajo. Después de varios meses, su empleador le dijo que no había trabajo para ella por no poder cargar cosas pesadas y la despidieron.

La desesperación de ser madre soltera y sentirse impotente, fue la motivación para buscar ayuda con Los Defensores.

El abogado de Los Defensores la ayudo a continuar sus terapias físicas y después de varios meses de negociaciones una compensación fue otorgada para Cristina. El abogado la ayudo a recuperar sueldos perdidos e incluso una compensación por despido injusto.

Cristina
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Christian iba manejando rumbo al trabajo, quería llegar temprano para empezar bien su jornada. En el camino, cruzando la intersección fue impactado en el costado de su vehículo por la parte delantera de un coche. “Nunca pensé que eso me pasaría a mí”, Christian en estado de confusión fue atacado verbalmente por el otro conductor.

Después del accidente, Christian al no saber que hacer, escucho un comercial de Los Defensores y decidió llamar, él tuvo temor, “Las aseguranzas se van hacer bolas y me van a dejar fuera.”

Cuando habló a Los Defensores, le confirmaron que si no ganaban su caso no pagaría nada y eso lo relajo. “Los abogados son muy amables, al tanto de todo. Nunca me cobraron nada, nunca me exigieron nada.” Después de un tiempo, el caso se resolvió y todos los gastos del accidente se pagaron. “Ahora manejo más atento”.

Christian